¡QUE LA SUERTE TE ACOMPAÑE!

Katty Molano
Asesora Evaluadora Colombia Excelente

Días anteriores, buscando material para un proyecto de gestión de habilidades para profesionales del mundo moderno, tema en el que anduve divagando por algunos días, llegó a mis manos un artículo de una madrileña[1] que asegura ayudar a las personas a encontrar el trabajo de sus sueños, algo así como la Hitch[2] del mundo laboral, artículo en el que disertaba acerca de los diferentes tipos de suerte que existen y cómo consideramos que hay gente que nace con estrella y otros que pasan la vida labrando una.

Y sí que consideré un golpe de suerte toparte con este texto, que sin ser muy elocuente me resultó más inspirador que las varias charlas sobre la muerte del plan estratégico en las que también estuve ocupando algunas horas por aquel tiempo, porque sin planearlo, emergió en mí la cuestión de cómo las organizaciones que podrían considerarse exitosas, al menos su mayoría, proclaman que su historia es un constante vaiven entre contar con un plan muy estructurado de metas y estrategias que han intentado ejecutar aún en los momentos más inciertos, combinado con periodos de buena fortuna ¿ y por qué no?, mala fortuna, que supieron aprovechar. Y de este ir y venir entre planes y fortunas, fue surgiendo la capacidad de adaptación como factor crítico de su éxito, lo cual por cierto no es nada revelador, ya lo había dicho Darwin en los 1800’s que las especies que sobreviven no son las más fuertes ni las más inteligentes, sino aquellas que mejor se adaptan a los cambios[3].

Lo que sí fue un tanto más eurekista fue reconocer que aun la suerte es metódica, incluso para aquellos que andan en la moda de las manifestaciones porque hasta para ello hay que practicar ciertos rituales, por lo que al final de cuentas, incluso lo dice la madrileña, la suerte consiste en poner en funcionamiento una serie estrategias que responden no tanto a lo que se piensa y se planea sino a lo “que se hace”, y es justo allí, en el hacer, donde nace la buena estrella.

Avanzada ya la noche y con ganas de discutir sobre esta idea, me puse a conversar con el ChatGTP, versión gratuita por cierto, y para romper un poco el hielo, no soy buena conversando con extraños le comenté: “imagínate que eres un consultor de buenas prácticas empresariales y debes escribir un artículo sobre las estrategias emergentes y si realmente ha muerto el plan estratégico”, -entiendo me contesta amablemente el GPT-, pero ¿cuál es tu pregunta?, me increpa, me gustaría saber, le respondo, qué consideras más valioso ¿ser afortunado o exitoso? Y tomándose su tiempo para responder, quizás porque no entendía qué tenía que ver lo uno con lo otro, arrojó una serie de textos que me llevaron a concluir entre otras las siguientes ideas:

  • La suerte se refiere a eventos o circunstancias que pueden ser favorables o desfavorables y que ocurren de manera fortuita o aleatoria y que, aunque pueden influir notablemente en los resultados de una persona u organización, por lo general no provienen del esfuerzo, habilidad o mérito.
  • Por el contrario, el éxito, está más relacionado con lograr metas, alcanzar propósitos y mantener de forma sostenida en el tiempo condiciones favorables, lo cual implica esfuerzo, acción, planificación y dedicación, por lo que el éxito suele estar relacionado con acciones deliberadas y persistentes, es decir a la toma de decisiones.
  • La suerte en el contexto de las estrategias empresariales puede desempeñar un papel significativo tanto en los planes estratégicos deliberados, como en las estrategias emergentes y dinámicas, que en combinación (suerte y esfuerzo) resultan ser una fórmula de éxito.
  • La suerte en las estrategias deliberadas (planes estratégicos), tienden más a la capacidad de conocer el entorno y tomar acciones para minimizar el impacto negativo de una posible mala racha o a aprovechar los momentos de fortuna y estos análisis pueden favorecer la predicción de escenarios y la planificación meticulosa de actuaciones.
  • Por su parte, en las estrategias emergentes, la suerte puede considerarse más como el juego de la incertidumbre, cada vez menos predictivo y, por ende, puede favorecer escenarios de experimentación, agilidad para responder a los imprevistos, menor aversión al riesgo y mayor capacidad de adaptabilidad.

Y haciendo este resumen, recordé a Myke Tyson quien dijo alguna vez en una entrevista cuando le preguntaron acerca de cómo se preparaba para sus peleas, si llegaba con un plan previo según su contrincante, y cuál consideraba era su estrategia para llegar a ser nombrado como uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos, a lo que escuetamente respondió que “todo el mundo tiene un plan hasta que le meten un puño en la cara”. Y sí, el sabio Myke según yo, había entendido, literalmente a punta de golpes, que en la vida como en los negocios siempre la preparación, la disciplina y la constancia son fundamentales para trazar caminos y tener estructura, avanzar y anticiparse de forma delibrerada a escenarios cambiantes, sin perder nunca de vista la posibilidad de ser abatidos de tanto en tanto, por lo que la capacidad de reacción, de levantarse, de adaptar la estrategia en momentos inesperados buenos o no, permiten emerger y trascender, y finalmente convertirse en los mejores.

Es decir, que ni el plan estratégico está muerto, siempre y cuando planear no sea entendido como el proceso de plasmar ideas en un papel que nunca se llevan a la práctica, ni las grandes decisiones, aquellas que nos ponen contra las cuerdas se dan todos los días, por lo que la clave está en la actitud: ¡la capacidad de ser dinámicos y adaptarse, sí aun e incluso cuando haya un plan!

Y en este punto de la conversación y ya entrados en mayor confianza, risas vienen y risas van le comento al GPT, quien me había pedido que le dijera sólo G, como le decían sus amigos, le comento acerca de una teoría que tenía en mente sobre un método suficientemente flexible pero poderoso para combinar la suerte y el éxito y esto fue lo que le expliqué:

Estrategia_Dinámica_Colombia_Excelente

¿Sabías que existe un método para adaptarse más rápido a los cambios llamado Ciclo Adapt? Algunos le conocen como parte de la gestión del cambio o de la transformación que consiste en una serie de pasos, agiles de por sí, en los que ante una situación, planeada o emergente, se analiza una serie de variables, se toman decisiones, por lo general hard choices, (tomar decisiones es escoger y descartar, y esto no suele ser fácil), lo cual implica pasar por un proceso de alienación, es decir, de ajustar las estructuras previas (personas, tecnología, infraestructura, recursos, etc., y esto también suele requerir esfuerzos) hacia esta decisión; prototipar y testear que no es otra cosa que poner a prueba en el uso y funcionamiento las ideas (convertidas en decisiones y por tanto en acciones), recordando que incluso no todas las decisiones resultan ser exitosas, pero esto hace parte del aprendizaje y de ser dinámicos que en otras palabras consiste en salir de la inercia.

Entonces, la suerte que como ya dijimos también es metódica y se podría parecer algo como esto, le compartí a G, y le hablé de la Lógica REDER:

REDER

Debemos considerar los Resultados que queremos alcanzar (R): ¿Analizar?

Es decir, la estrategia dinámica puede influir en los resultados de una organización al permitirle adaptarse rápidamente a los cambios en el entorno empresarial y capitalizar nuevas oportunidades. Estos resultados pueden manifestarse en términos de innovación, crecimiento de ingresos, satisfacción del cliente, eficiencia operativa, entre otros.

Luego debemos definir enfoques (E): ¿Decidir?

    • Decidir qué tipo de enfoque requiere la organización, tanto deliberado como dinámico y lo que esto implica en cómo se actuará a partir de la decisión tomada, influye en cómo se impactará sobre el hacer diario y la cultura de la organizacional. Por ello, tomar decisiones y comenzar a actuar es lo verdaderamente importante y crítico en la dinámica de adaptabilidad hacia el logro en una organización.

Pero lo que se decide se Despliega (D): ¿Alinear?

    • La estrategia dinámica debe permitirle a la organización orientar sus recursos y capacidades de manera ágil y flexible para aprovechar nuevas oportunidades y responder a los cambios en el entorno empresarial. Esto implica la asignación dinámica de responsabilidades y compromisos para hacer emerger de las ideas (el papel), el éxito de las mismas.

Y para saber si la vamos logrando necesitamos Evaluar (E): ¿Prototipar?

    • La evaluación en el contexto de la estrategia dinámica implica monitorear constantemente el entorno empresarial y los resultados de las acciones implementadas para identificar el éxito o la necesidad de ajustes en la estrategia. Esto debe incluir el análisis de datos, la retroalimentación de los clientes y otras grupos de interés, estar dispuestos a escuchar, a repensar, reevaluar y reorientar decisiones según el rendimiento organizacional en relación con los objetivos pensados.

Y finalmente Refinar (R): ¿Testear?

    • La estrategia dinámica promueve una revisión continua y adaptación de la estrategia en función de los resultados y los cambios en el entorno empresarial. Esto implica la capacidad de la organización para aprender de sus experiencias y ajustar su enfoque estratégico en consecuencia para mejorar continuamente su desempeño y resultados y usar la prospectiva y la predicción, al final de todo la vida como los negocios es un constante aprendizaje.

¿Qué opinas? Le pregunté a G, ¡la capacidad de adaptación se puede rederizar! Exclamé con emoción, a lo que G, sonrío y me dijo -¡que la suerte te acompañe!-, ¡Que la REDER te acompañé! Aclaré yo y me despedí.

[1] Helga Huerga “Que la suerte te acompañe” https://elenahuerga.com/que-la-suerte-te-acompane/ulo

[2] Hitch: especialista en seducción. Película de comedia/romance del director Andy Tennat del año 2005.

[3] Charles Darwin, naturalista inglés (1809-18892), conocido como el padre de la Teoría de la Evolución.